ferula communis o cañaheja

Ferula communis o cañaheja: usos y propiedades

La Ferula communis o cañaheja, como también es conocida, es una planta que puede alcanzar los 3 metros de altura. Perteneciente a la familia de las umbelífiras, la cañaleja goza de una floración realmente llamativa

 

Habitualmente esta especie suele ser confundida con el Hinojo. Para poder diferenciales tan sólo debes fijarte en una cosa: el aroma que desprende. Mientras que la cañaleja no tiene un olor característico, el Hinojo posee un aroma anisado muy potente.  

 

Descripción de la Ferula communis 

La cañaheja cuenta con unos tallos muy robustos de forma cilíndrica. Es tal su vigor que estos pueden llegar a medir hasta dos centímetros de diámetro. Las flores de la parte alta de la Ferula son las únicas umbellas fértiles de la planta.  

 

Por otro lado, los pétalos de la cañaheja son de un intenso color amarillo. Además, la disposición y formación de sus flores es muy curiosa. De cada umbella floral, cuyo nombre debe precisamente al parecido con un paraguas, se ramifican hasta 5 tallos florales. A su vez, de cada uno de ellos nacen de 20 a 40 flores pequeñas que, juntas, forman visualmente una bola. 

 

Precisamente este número tan alto de flores por cada umbela, convierten a esta especie en una planta muy visitada por los polinizadores. Es el caso concreto de las abejas, ya que la Ferula communis es una planta muy melífera. 

 

Habitat y distribución de la cañaleja 

Campo de ferula communis o cañaheja

Podemos encontrar a la Ferula communis en la cuenca y región mediterránea, desde Anatolia hasta España y el norte de África. En España podemos verla en prácticamente toda la península ibérica; sin embargo, no tendremos la misma suerte en zonas del atlántico. Sin embargo, existe una pequeña salvedad protagonizada por la especie Ferula communis Linkii, autóctona de las Islas Canarias. 

 

En lo que respecta a la localización exacta de su crecimiento, lo normal es verla en praderas, pastizales y matorrales o estepas. De hecho, es muy frecuente en zonas rocosas. Esto se explica porque la cañaheja tiene un gran requerimiento de horas de sol, por lo que buscará siempre zonas que estén abiertas y soleadas. En cuanto a las altitudes que maneja esta especie, lo habitual está entre 200 y 2.000 metros de altura. Y aunque no requiere un suelo muy fértil, sí que busca suelos con un buen drenaje.  

 

Debido a sus bajas necesidades hídricas, suelen aparecer en forma de maleza en mitad de los campos en España. Al igual que sucede con la Ambrosía o, incluso, la Citronela.   

 

Ferula communis Linkii 

Tal y como hemos señalado, existe una salvedad a la presencia de la Ferula communis en zonas de clima oceánico. En las Islas Canarias ha logrado adaptarse de tal manera que existe una especie propia de la zona denominada: Ferula communis Linkii. Esta variedad podemos encontrarla en todas las islas del archipiélago canario salvo en Lanzarote. Siendo la zona más poblada de cañaheja la isla de Gran Canaria.  

 

La floración de la Ferula linkii tiene lugar a finales del invierno y se alarga habitualmente hasta la primavera. Sin embargo, es posible encontrarla hasta mediados de verano.  

 

La cañaheja suele sufrir la visita de un hongo llamado Pleurotus eryngii var. ferulae, que es muy valorado en diferentes aspectos. Esta seta de cañaheja, mucho más conocida por su nombre común: “seta de cardo”, parasita las raíces de la planta. 

 

Propiedades de la Ferula 

Como suele suceder con muchas otras plantas, la Ferula communis también tiene propiedades medicinales. El término Ferula alude a su alto contenido en ácido ferúlico, componente que ha sido muy empleado en el sector farmacéutico para tratar patologías de la piel. Empleado en multitud de ocasiones para la elaboración de ungüentos y cataplasmas capaces de tratar pequeñas lesiones e, incluso, las hemorroides. Además, sus propiedades analgésicas y antitérmicas la convierten en un gran aliado en la lucha contra los resfriados o las fiebres. Por si esto fuera poco, también está indicada para tratar problemas de flatulencias y digestiones pesadas.  

Este alto contenido en ácido ferúlico tiene también sus contraindicaciones, especialmente de cara al ganado. Su ingesta puede provocar ferulismo, intoxicación que afecta principalmente al ganado bovino y equino. Esta enfermedad cursa con hemorragias internas y externas, provocando un cuadro clínico muy grave que suele acabar con la muerte del animal si no es detectado a tiempo.  

 

Lógicamente, esta especie no es apta para consumo humano por encima de las cantidades mínimas permitidas. 

Fuera de las aplicaciones medicinales o beneficiosas para la salud, la Ferula communis también tiene su aplicación. De hecho, ha sido empleada durante años como tinte natural, de cuyo aprovechamiento podemos obtener un tinte verde-amarillento.  

Scroll al inicio